miércoles, 18 de mayo de 2011

"Cuando los neurotransmisores se convierten en remisión"





Cuando los neurotransmisores se convierten en remisión en el tratamiento de la esquizofrenia
Última actualización de la noticia: 17/05/2011
Cuando los neurotransmisores se convierten en remisión en el tratamiento de la esquizofrenia
El cerebro humano es el órgano más complejo que se ha generado a lo largo de la evolución. Su complejidad queda demostrada al saber que contiene 100.000 millones de neuronas que se comunican entre sí y que lo hacen a través de los neurotransmisores. Se ha calculado que cada neurona recibe unos 1000 contactos, lo que significa que en nuestro cerebro hay unos 100 billones de contactos neuronales.
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El profesor Francesc Artigas, profesor del departamento de Neuroquímica y Neurofarmacología del Institut d’Investigacions Biomèdiques de Barcelona del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), IDIBAPS, ex-Presidente, y miembro de la Sociedad Española de Neurociencia (SENC), explica cuales son los tratamientos que se recomiendan a este tipo de pacientes.
Neurotransmisores
Los neurotransmisores son unas sustancias químicas que segregan las neuronas para incidir en la membrana de la neurona siguiente, con la finalidad de provocar una serie de efectos. Esta red de 100.000 millones de neuronas se comunica y construye nuestras emociones, nuestra inteligencia, nuestro comportamiento y nuestro pensamiento.
Enfermedades neuropsiquiátricas
Las enfermedades neuropsiquiátricas pueden ser de dos grandes grupos, las neurológicas, debidas a una degeneración neuronal, como el Alzheimer o el Parkinson, y las psiquiátricas, que son aquellas donde no hay una muerte neuronal tan acusada como en las neurológicas, pero sí un mal funcionamiento de las redes cerebrales. La esquizofrenia es el paradigma de una enfermedad causada por un mal funcionamiento de esas redes neuronales, una enfermedad que produce una amplia serie de síntomas elevada gravedad.
Afectación de la Esquizofrenia en el Cerebro
Los estudios de neuroimagen que se han ido haciendo a lo largo de los años demuestran que la esquizofrenia altera unas zonas determinadas del cerebro. La que más alteraciones sufre es la corteza o lóbulo frontal, así como el hipocampo. En menor medida también se producen alteraciones en otras áreas subcorticales, como el tálamo, pero sobre todo destacan los cambios producidos en la parte frontal.
Drogas y Esquizofrenia
El consumo de drogas puede provocar muchos de los síntomas propios de la esquizofrenia, pero no la enfermedad en sí. Las anfetaminas, por ejemplo, crean un cuadro psicótico análogo al observado en esquizofrenia. Por otra parte, la quetamina y otras drogas similares como la fenciclidina, producen tanto síntomas psicóticos como los síntomas afectivos de la esquizofrenia.
Tratamiento Farmacológico
A día de hoy se cuenta con un tratamiento efectivo para la esquizofrenia, aunque quedan muchos aspectos por mejorar. Hablamos de la primera enfermedad psiquiátrica por la cual se halló un tratamiento farmacológico, descubierto casi por casualidad. Ese primer medicamento (la clorpromazina) se descubrió a finales de los años 50, cuando se buscaba una sustancia anestésica. Se le dio a probar a un grupo de enfermos esquizofrénicos agitados, siendo muy efectiva. Gracias a este fármaco y a los que le siguieron, hoy en día los enfermos esquizofrénicos pueden vivir fuera de instituciones psiquiátricas cerradas y llevar una vida en su entorno familiar.
Antipsicóticos
Una de las teorías clásicas de la esquizofrenia es el pensar que ésta es una enfermedad causada por la malfunción de un neurotransmisor, la dopamina. Los fármacos antipsicóticos de primera generación tienen un efecto que bloquea las acciones de la dopamina. Gracias a esa atenuación se consigue una reversión de los síntomas psicóticos como el delirio, las alucinaciones, el comportamiento aberrante y la agresividad. Sin embargo, no resultan efectivos cuando hablamos de síntomas más depresivos o de tipo ansioso, ni tampoco con los problemas cognitivos que tienen estos enfermos. Los medicamentos de segunda generación bloquean las acciones de la dopamina y de la serotonina, y gracias a esta doble acción son más efectivos en este otro tipo de síntomas.
Efectos Adversos
Los fármacos antipsicóticos también generan efectos secundarios. La dopamina es también el neurotransmisor que utiliza una serie de circuitos motores, y precisamente la enfermedad de Parkinson, con claras alteraciones motoras, está causada, al menos en parte, por la muerte de neuronas que utilizan dopamina. Los antipsicóticos de primera generación, por tanto, producen una especie de parkinsonismo farmacológico. Los de segunda generación no resultan tan nocivos en este aspecto.
La Investigación Continua
Los tratamientos actuales de la esquizofrenia se pueden mejorar pero hay que reconocer que ese es un reto muy difícil. Las investigaciones de multitud de laboratorios farmacéuticos y de centros de investigación públicos se aúnan en una dirección. La esquizofrenia es una de las enfermedades más graves del cerebro que, a diferencia de otras, se presenta en edades muy jóvenes. Por eso es muy importante atajar esa sintomatología al principio de la enfermedad.

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